Libre Albedrío
La mayoría de las personas dicen creer en el "libre albedrío". ¿Tiene usted alguna idea de lo que ello significa? Creo que usted encontrará mucha superstición en este tema. El albedrío es honrado como el gran poder del alma humana, el cual es completamente libre para dirigir nuestras vidas. Pero, ¿de qué es libre? Y, ¿cuál es su poder?
El Mito De La Libertad Circunstancial
Nadie niega que el hombre tiene una voluntad - eso es, una facultad de elegir lo que él desea decir, hacer, y pensar. Pero, ¿alguna vez ha reflexionado en la lamentable debilidad de su voluntad? A pesar de que usted tenga la habilidad para tomar una decisión, usted no tiene el poder para llevar a cabo su propósito. El albedrío puede planear un curso de acción, pero el albedrío no tiene el poder para llevar a cabo su propósito.
Los hermanos de José lo odiaban. Ellos lo vendieron para ser un esclavo. Pero Dios utilizó sus acciones para hacerlo un gobernante sobre ellos mismos. Ellos eligieron su curso de acción para dañar a José. Pero Dios en Su poder, dirigió los eventos para el bien de José. José dijo, "Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien." (Génesis 50:20).
Y ¿cuántas de sus decisiones son miserablemente frustradas? Puede elegir ser un millonario, pero es muy probable que la providencia de Dios lo impida. Usted puede decidir ser un erudito, pero la mala salud, un hogar inestable, o la falta de recursos pueden frustrar su voluntad. Usted elige ir de vacaciones, pero en lugar de eso un accidente automovilístico puede enviarlo al hospital.
Al decir que su albedrío es libre, ciertamente no significa que éste determine el curso de su vida. Usted no escoge la enfermedad, la pena, la guerra, y la pobreza que han arruinado su felicidad. Usted no escogió tener enemigos. Si el albedrío del hombre es tan poderoso, ¿por qué no elige vivir por siempre? Pero usted debe morir. Las grandes circunstancias que moldean su vida no pueden agradecer a su albedrío. Usted no seleccionó su estatus social, color e inteligencia, etc.
Cualquier reflexión sobria sobre su experiencia producirá la conclusión, "El corazón del hombre piensa su camino; mas Jehová endereza sus pasos." (Proverbios 16:9). Más que ensalzar el albedrío humano, deberíamos humildemente loar al Señor cuyos propósitos dan forma a nuestras vidas. Como Jeremías confesó, "Conozco, oh Jehová, que el hombre no es señor de su camino, ni del hombre que camina es el ordenar sus pasos." (Jeremías 10:23)
Sí, usted puede elegir lo que usted quiere, y usted puede planear lo que hará. Pero su voluntad no es libre para llevar a cabo nada contrario a los propósitos de Dios. Tampoco tiene ningún poder para alcanzar sus metas, sino aquellas, las cuales Dios le permita. La próxima vez que esté tan apasionado con su propio albedrío, recuerde la parábola de Jesús acerca del hombre rico. El hombre rico dijo, "Esto haré; derribaré mis graneros, y los edificaré mayores; y allí guardaré mis frutos y mis bienes..." Pero Dios le dijo: "Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma". (Lucas 12:18-21). Él fue libre para planear, pero no libre para llevar a cabo, así es con usted.
El Mito De La Libertad Ética
Pero la libertad de albedrío es citada como un factor importante al tomar decisiones morales. Es dicho que el albedrío del hombre es libre para elegir entre el bien y el mal, Pero, de nuevo debemos preguntar, ¿de qué es libre? Y ¿qué es libre de elegir el albedrío del hombre? el albedrío del hombre es su poder para elegir entre alternativas. Su albedrío decide sus acciones de un número de opciones. Usted tiene la facultad para dirigir sus propios pensamientos, palabras y actos. Sus decisiones no están creadas por una fuerza exterior, sino dentro de usted mismo. Ningún hombre es obligado a actuar contrariamente a su albedrío, ni forzado a decir lo que él no desea. Su albedrío guía sus acciones.
Aún así, esto no significa que el poder para decidir está libre de toda influencia. Usted toma elecciones basado en su entendimiento, sus sentimientos, sus gustos y disgustos, y sus deseos. En otras palabras, ¡su albedrío no está libre de usted mismo! Sus elecciones están determinadas por su propia personalidad básica. El albedrío no es independiente de su naturaleza, sino esclavo de ésta. Sus elecciones no moldean su personalidad, sino su personalidad guía a sus elecciones. El albedrío es algo parcial a lo que usted sabe, siente, ama y desea. Usted siempre elige sobre la base de su determinación, de acuerdo a la condición de su corazón.
Es justo por esta razón, que su albedrío no es libre para hacer el bien. Su albedrío es el sirviente del corazón y su corazón es malo "Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal." Génesis 6.5; "No hay quien haga lo bueno, no hay ni siquiera uno" Romanos 3.12. Ninguna fuerza obliga al hombre a pecar en contra de su voluntad, pero los descendientes de Adán son tan perversos que siempre eligen lo pecaminoso.
Sus decisiones están moldeadas por su entendimiento, y la Biblia dice de todos los hombres "...y su necio corazón fue entenebrecido" Romanos 1.21. El hombre solo puede ser justo cuando desea tener comunión con Dios. Pero, "No hay quien busque a Dios." Romanos 3:11. Sus apetitos anhelan pecado, y así no pueden elegir a Dios. Elegir el bien es contrario a la naturaleza humana. Si usted elige obedecer a Dios, esto será el resultado de un impulso externo. Pero usted es libre para elegir, por lo tanto su elección está esclavizada a su propia naturaleza malvada.
Si carne fresca y ensalada aderezada fueran colocadas frente a un león hambriento, escogería la carne. Esto es debido a que su naturaleza dicta la selección. Así es con el hombre. El albedrío del hombre es libre de fuerzas externas, pero no de la inclinación de la naturaleza humana. Esta inclinación es en contra de Dios. Las fuerzas de decisión del hombre son libre para elegir cualquier cosa que el corazón humano dicta, por lo tanto, no hay posibilidad de que un hombre elija agradar a Dios, sin un trabajo previo de la gracia divina.
Lo que la mayor parte de la gente da a entender por libre albedrío, es la idea de que el hombre es, por naturaleza, neutral y por lo tanto, capaz de elegir entre el bien y el mal. Esto simplemente no es verdad. El albedrío humano y el total de la naturaleza humana están inclinados continuamente solo al mal. Jeremías preguntó: "¿Mudará el etíope su piel, y el leopardo sus manchas? Así también, ¿podréis vosotros hacer bien, estando habituados a hacer mal?" Jeremías 13.23. Es imposible. Es contrario a la naturaleza. Así, los hombres desesperadamente necesitan la transformación sobrenatural de su naturaleza, de otra manera, sus albedríos son esclavizados para elegir el mal.
A pesar de las grandes ovaciones que le son dadas al "libre albedrío", hemos visto que el albedrío del hombre no es libre para elegir un camino contrario a los propósitos de Dios, ni libre para actuar contrariamente a su propia naturaleza moral. Su albedrío no determina los eventos de su vida, ni las circunstancias de ésta. Las elecciones éticas no están creadas por una mente neutral, sino siempre dictadas por su personalidad.
El Mito De La Libertad Espiritual
Sin embargo, muchos aseguran que el albedrío humano hace la elección decisiva de vida espiritual o muerte espiritual. Aquí el albedrío es libre, tanto para elegir la vida eterna ofrecida en Jesucristo, como para rechazarla. Es dicho que Dios dará un nuevo corazón a todo aquel que elija por la fuerza de su propio libre albedrío, recibir a Jesucristo.
No puede haber duda, que recibir a Jesucristo es un acto de albedrío humano, es a menudo llamado fe, pero ¿cómo vienen los hombres a recibir voluntariamente al Señor? Esto es generalmente respondido "por el poder de su propio libre albedrío" ¿Pero cómo puede ser esto? Jesús es un profeta. Recibirlo significa creer en todo lo que Él dice. En Juan 8.41-45, Jesús deja en claro que usted nació de Satán. Este padre maligno odia la verdad y da la misma predisposición en su corazón por naturaleza. Por lo tanto, dijo Jesús "Porque yo les digo la verdad, ustedes no creen en mí" ¿Cómo brinca el albedrío del hombre para elegir creer en lo que la mente humana aborrece y niega?
Además, recibir a Jesús, significa abrazarlo como a un Sacerdote -eso es beneficiarnos de Él, depender de Él para pactar paz con Dios por sacrifico e intercesión. Pablo nos dice que la mente con la cual nacimos es hostil a Dios ("Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios" Romanos 8.7) ¿Cómo puede el albedrío escapar a la influencia de la naturaleza humana con la cual nació, con una violenta enemistad a Dios? Sería insano para el albedrío elegir la paz, cuando cada hueso y gota de sangre clama por rebelión.
Entonces también, recibir a Jesús significa darle la bienvenida como a un Rey. Significa elegir obedecerle en cada orden, confesar Su derecho a reinar, y adorarlo ante su trono. Pero la mente humana, las emociones y los deseos, todos gritan "No queremos que éste reine sobre nosotros." (Lucas 19.14). Si mi ser completo odia Su verdad, odia Su gobierno, y odia la paz con Dios, ¿como puede mi albedrío ser responsable para recibir a Jesús? ¿Cómo puede tal pecador tener fe?
No es el albedrío del hombre, sino la gracia de Dios, la que debe ser agradecida, por darle a un pecador un nuevo corazón. A menos que Dios cambie el corazón, cree un nuevo espíritu de paz, de veracidad y de sumisión, el hombre no elegirá recibir a Jesucristo y la vida eterna en Él. Un nuevo corazón debe ser dado antes de que un hombre crea, o de lo contrario, el albedrío del humano estará esclavizado sin esperanza a la malvada naturaleza humana -aún en el asunto de la conversión. Jesús dijo "No te maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo." Juan 3.7. A menos que usted lo haga, nunca verá su reino.
Lea Juan 1.12 y 13. Dice que aquellos que creen en Jesucristo han sido "nacidos, no de la voluntad humana, sino de Dios". Así como su albedrío no es responsable de su venida a este mundo, tampoco es responsable por el nuevo nacimiento. Es Su Creador con quien tiene que estar agradecido por su vida. Y si cualquier hombre está en Cristo, él es una nueva creación "De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es" 2 Corintios 5.17. ¿Quién eligió alguna vez ser creado? Cuando Lázaro se levantó de los muertos, él eligió responder al llamado de Cristo, pero no eligió regresar a la vida. Así Pablo dijo en Efesios 2.4-5 "aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos)". La fe es el primer acto de un albedrío hecho nuevo por el Espíritu Santo. Recibir a Cristo es un acto humano, tanto como lo es el respirar, pero Dios debe dar primero vida.
No nos extraña que Martín Lutero escribiera un libro titulado "Sobre el albedrío esclavo", el cual se considera uno de sus más importantes tratados. El albedrío está en las cadenas de una naturaleza humana malvada. Usted que exalta el libre albedrío como una gran fuerza se está adhiriendo a una raíz de orgullo. El hombre, caído en pecado, está completamente sin ayuda y sin esperanza. El albedrío del hombre no ofrece esperanza. Fue el albedrío eligiendo la fruta prohibida la que nos trajo a la miseria. La poderosa gracia de Dios por sí misma ofrece liberación. Láncese sobre la misericordia de Dios para la salvación, pida al Espíritu de la Gracia que pueda hacer morar un nuevo espíritu dentro de Usted.
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